Aaaay......un suspiro es lo primero que experimento al sentarme delante de esta página en blanco virtual, es una noche especial....sí lo es, aunque digas que son chorradas, que ya somos mayores para esto....NO,NO,NO Y MIL VECES NO.
Es una noche especial para ellos, los pequeños, pero jamás debería haber dejado de ser especial para ninguno de nosotr@s.
Sí ya lo sé, yo tambien lo pienso..........se ha convertido en la noche de consume hasta morir, ya no basta con un juguete de toda esa larga lista de juguetes que los niños piden, les llenamos el cuarto de montones de cosas que luego quedan almacenadas en un trastero.
Hoy sin ir más lejos oía como una madre le contaba a otra que aún tenía en el trastero la moto de batería que le habían traido los Reyes a su hijo.
Muchos sois padres y madres y sois conscientes de eso, los niños consumen lo que los adultos queremos que consuman, ellos no han construido este mundo, lo hicimos nosotros y algo tendremos que hacer...........no sé el qué, pero quizás una educación basada en el consumo responsable desde que son muy pequeños pueda ayudar a cambiar algo........no lo sé de verdad, pero no me gusta lo que veo y menos aún me gusta la pasividad con que dejamos que siga sucediendo, quejándonos en reuniones de amig@s, en el autobús, en los bares, en las paradas.....y seguimos consumiendo........
Y la ilusión, os acordáis de la ilusión, esa compañera a la que mucha gente dejó atrás, ¿por qué?
la ilusión es la que mueve el motor de la vida, la que nos hace sonreir cuando alcanzamos nuestro objetivo, o incluso cuando nos acercamos a él....lo sé, cada año que pasa muchas son las ilusiones que nunca se cumple o que se truncan, pero......la vida es reir y llorar, dejar atras lo que está atrás y mirar lo que tengo delante...no lo que está más allá.
Nunca deberíamos perder la ilusión, perder ese niñ@ que todos llevamos dentro, ni tampoco dejarlo dormir, hay que despertarle y de vez en cuando bajar de las alturas y tirarnos al suelo, y subirnos a un tobogán (aunque nos quedemos encajados en él), sentir otra vez la brisa mientras volamos en el columpio.....probad a hacerlo en cuantito podáis, os espero en La Isla de Nunca Jamás,
Mientras no dejéis de soñar...¿vale?
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